Desde hace días se oye el eco de nuestras voces en la que fuera nuestra casa. Esta noche por todo lado parece zona de desastre: cajas con cualquier cantidad de cosas, libros, mis muñecos, mis cuadros, mi material de día de muertos, un inexplicable árbol de navidad, etcétera.
La otra casa, la que apenas comienzo a llenar de mí, mis cosas, mi presencia y mi esencia, ya va tomando cuerpo. Por las noches crujen sus maderas y esta mañana pude darme cuenta de cuánta luz entra por todo lado, ya que anteriormente como estubo nublado o con lluvia no había podido apreciarlo.
En la entrada ya tengo dos macetas, que es lo que le va dando vida. Y mañana, para comenzar a llenarla de calor humano, vamos a partir la rosca de reyes en mi casa. Ya tengo estufa con gas, gracias a la pericia de Edgar, pero sigo sin el calentador de agua para la regadera.
En fin, poco a poco... por ahora estoy moida, mi columna me está matando que anoche no me dejó dormir.
Pero la buena noticia, es decir, el notición, es que ya tengo empleo a partir del próximo lunes, y será como me gusta, con niños.
La otra casa, la que apenas comienzo a llenar de mí, mis cosas, mi presencia y mi esencia, ya va tomando cuerpo. Por las noches crujen sus maderas y esta mañana pude darme cuenta de cuánta luz entra por todo lado, ya que anteriormente como estubo nublado o con lluvia no había podido apreciarlo.
En la entrada ya tengo dos macetas, que es lo que le va dando vida. Y mañana, para comenzar a llenarla de calor humano, vamos a partir la rosca de reyes en mi casa. Ya tengo estufa con gas, gracias a la pericia de Edgar, pero sigo sin el calentador de agua para la regadera.
En fin, poco a poco... por ahora estoy moida, mi columna me está matando que anoche no me dejó dormir.
Pero la buena noticia, es decir, el notición, es que ya tengo empleo a partir del próximo lunes, y será como me gusta, con niños.
Comentarios
Un abrazo muy apretadito.
Patricia