Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de noviembre, 2009

José Emilio Pacheco

¡Maestro! ¡Felicidades por el merecidísimo premio! ¡¡¡Fanfarrias al poeta!!!

Han leído a Yoani Sánchez?

Hace meses que alguien me habló sobre su blog. Cuando lo leí consideré que estaba bien escrito y que nos podía ofrecer un punto de vista fresco y actual de lo que se vive en su país. Tengo amigas en Cuba y no quise comprometerlas preguntando mucho por Yoani, pero los comentarios fueron fríos. Yo misma me hacía muchas preguntas por el hecho de que esa chica tuviera semejante blog, pues me consta lo difícil que es que un cubano -o cualquiera- tenga acceso a ese servicio. En algunas ocasiones, a causa del pesimismo de sus apuntes, le escribí correos preguntándole si de verdad no tenía NI UN SÖLO recuerdo amable en su tierra, de su infancia o de alguna época de su vida, y comentó algo al respecto en su blog. Curiosamente acabo de recibir una entrega de Red Voltaire con un ensayo sobre el fenómeno Yoani Sánchez, y me siento obligada a compartirlo ya que yo misma incluí por mucho tiempo una liga al blog mencionado. Ahora, cada quien saque sus conclusiones. El blog se llama Generación Y http

Observaciones para una niña de plata

La niña está en el espejo, niña vestida de negro. Un mazo dobla sus hombros pero no rompe sus huesos. Carga ese peso la niña pálida de tez y cuerpo sin que una mano dé ayuda ni levante infame hierro. Ya mira en el horizonte la luz que desencadena, ya mira escrito en su mano el final de su condena. ¡Sube niña al arcoiris, toca la luna de seda! Engalana tus cabellos, perfúmate de azucena. Dale pecho al corazón que tanto estuvo de duelo y deja que esta canción te devuelva los anhelos.

Lecturas

De los libros de Carlos Castaneda que he leído, "Relatos de poder" me ha parecido, sobre todo en su capítulo final, el más poético y emotivo, que me conmovió al punto de tender discretamente una lágrima. Experimenté por medio de la lectura la plena solitud de un ser encarando al infinito, un ser fortalecido y sin embargo tembloroso, en el impacto de vivir con claridad la sensación de estar frente a algo más grande que la muerte, con una carga de asombro y de respeto pero un miedo descomunal por sentirse desnudo y desvalido ante el misterio de lo eterno. ¡Hay tanta poesía en eso! en lo escrito en el sentido de relato de un hecho por el hecho en sí, y por la forma como ha quedado expresado. Las imágenes oníricas de los viajes en estado alterado de conciencia son vívidas y magníficas. Ignoro a qué edad escribió Castaneda sus libros, pero lo que contienen fue hecho por alguien con madurez y sabiduría, además de sensibilidad e impecable uo del lenguaje, sin mencionar a la poesía t

¡POR FIN!

Sofía acaba de terminar su primera obra de acrílico sobre tela. Dice que le gustó trabajar sobre tela, y pintar las frutas. Lo más difícil para ella fue dar el acabado a la mesa. ¡Felicitaciones, Sofi!

Portada?

Bueno, hasta el momento ignoro si estos intentos sirvieron para la portada de Carmen, pero sí en cambio para compartir...

Trabajos

Estos días han sido un poco agresivos para mi por el frío, pero es delicioso recogerse y disfrutar del calor del hogar. Lo malo que los perros a las cinco de la noche ya quieren merendar porque está oscuro, andan todos descontrolados. Foto: CarmenAmato me había pedido una portada para su libro, ya en edición y éste ha sido mi último intento por conseguir atrapar la idea que tenía, sin que sepa y anún si ha sido de su agrado... Aquí los diferentes estadios del cuadro, la del fondo claro es la final. Mi alumna sigue avanzando en su exploración con el acrílico sobre tela, su bodegón va cobrando cada vez más vida. Esta mañana ha dado señales de vida en amigo de quien no supe nada en mucho tiempo. Bienvenido, Daniel, a ésta tu casa. Y como dijo Aquél: ¡Salud y saludos! Hey maestro, mándame las fotos de tu último trabajo para presumir! Este viernes, curso de redacción en el CETYS para los alumnos de leyes, me entusiasma trabajar con los jóvenes. Y el proyecto de Huajuapan, resucita!!! Acaban

Mapas, vidas

Antenoche, trabajando en mi estudio, en la quietud del silencio y el reposo...

El tío Jesús

Lo conocí en el año de 1970, cuando llegué a la ciudad de México procedente de Guadalajara. Era esposo de mi tía Tere, una prima de mi madre a quien veía yo de niña cuando ella nos visitaba en Orizaba cuando navidad. Mi tía estaba entonces por dar a luz a su primera hija y buscaba a quien dejar en su lugar mientras regresaba de su incapacidad. Así fue como entré a trabajar al Instituto de Hidráulica de la UNAM y conocí al tío Jesús. Primero me impresionó su seriedad, reforzada por unos gruesos lentes de cristales verdosos que le conferían un aire adusto que ciertamente contrastaba con su gentileza y educación. Como yo salí del instituto debido a los problemas que todavía había en la universidad -secuelas del 68- que provocaban que no entraran los autobuses a las facultades, y debido a la inseguridad de caminar hasta la salida de la Ciudad Universitaria, dejé de ver a mis tíos con aquella frecuencia, pues cuando trabajé donde mi tía nos íbamos a comer a su casa de la Av. Coyoacán, por l

Egos, egos

Me pregunto, cuando se me atraviesa una de esas personas que cargan dentro de sí un ego tan descomunal que se alcanza a percibir desde lejos, cómo harán para ir por la vida tan solos, tan llenos de sí mismos. Cuando una se asoma hacia su interior no puede menos que sorprenderse: son como el hombre invisible por dentro. Sin embargo, inconscientes de su vacío o no sé si debido a él, van por la vida haciéndole sentir al mundo que nadie los merece, que ninguno está a su altura. Imagino que debe ser frustrante encontrar tanta mediocridad en los alrededores, pero por otro lado eso mismo que creen les hará pensar que ellos mismos son el pináculo de la creación y se regodean en lo poco que son. Digo lo poco que son porque su única medida es su persona. No guardan dentro de ellos lo que muchos de nosotros: lo que nos dejan los demás, lo que aprehendemos de esos seres humanos que vamos conociendo a lo largo de la vida y nos permiten conocer sus valores, sus virtudes, sus sueños, y crecemos con e

¿ Se acuerdan?

Recién me escribió una de mis amigas sobre algo que leyó en mi blog, de cuando las lluvias en Valle Dorado, en el Df. Pues aquí van sus palabras, para que no sea sólo uno el punto de vista sobre el asunto: "El otro dìa leyendo tu blog, no me bajaste de burguesa porque mi casa en Mèxico està precisamente en la calle que se inundò de Valle Dorado, me hubieras oìdo reìrme a carcajadas por la descripciòn. En parte tienes razòn con respecto a las autoridades pero tambièn debemos aclarar que lo que pasò ahì no fue precisamente una inundaciòn por la lluvia sino que se reventò una tuberìa que las autoridades ya sabìan que estaba dañada y quizà fue por eso que actuaron rapidamente, por otro lado a mi no me ha tocado nada de la ayuda. Lo que si tengo que reconocer es la invaluable ayuda de los soldados porque a ellos les tocò el desalojo y la limpieza de todo. Precisamente fuimos a ver la casa y el panorama en la calle de Caracas es todavìa muy triste". Bueno, pues mi querida amiga, d

La Catrina del pintor

Muestra del arte de un colega... en el Café Arábiga, recién abierto en el puerto. Fotos de Irina y Alonso.

In memoriam

El mismo día en que hubo anunciación usted imaginó los zapatitos, la cuna, las colchitas, Le vinieron los miedos, qué nombres. qué colores , cuántos meses. La modificación de la rutina los avisos la nutrición y los antojos, las horas con insomnio y sobre todo el enigma, La rumorosa certidumbre de atestiguar la magia de otra vida. Pero la vida es vuelco, empuñadura. A veces río que corre, a veces sangre que se rueda. Las dieciséis semanas de esa vida extinguieron una a una sus plaquetas. Y qué dolor, qué grito ni qué llanto podrían decir de qué tamaño era la pérdida. Silencio y más silencio había. Con mil lágrimas mudas salaba usted las noches y pasaba las horas extendiendo silencio por los vientos. Desgarraduras en el cuerpo usted no las sentía. Únicamente imaginaba cómo, de qué color hubieran sido los rizos de su niño. Y en ese mismo día de la sorpresa usted abandonó los zapatitos y la cuna, se acuclilló en el filo de su pena y comenzó a vivir con rasgaduras.

Tiempo de Catrinas

En ocasión de Día de Muertos mi amigo Oscar Wong me hizo favor de enviarme calaveras hechas por poetas de Saltillo. Aquí la que recibí luego de mandar la foto de mi Catrina deseándoles Felíz Día de Muertos, escrita por Mayra Branch o al menos eso creo. Mil gracias, amigos! C on ese tipico traje A l mirarla pareciera T odo el que la conoció, R endido a sus pies cayera. I nconfundible su andar N nostálgica su mirada, A gridulce sonrisa desdentada. D icen se veia pálida I ndiferente a la vida V iven los seres hermosos, I gual a hojarascas vencidas. N inguna tristeza vislumbra, A hí permanecen sín vida. La foto es en Ensenada, B.C., al fondo se aprecia el Santuario de la ciudad. Nótense los cielos en este lugar... La foto de mi amigo Yahvé Cruz