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Esta mañana me enteré en el programa radiofónico de Carmen Aristegui, y en la voz de uno de sus invitados, Lorenzo Mayer, que Haití no solamente fue una colonia francesa en el S.XVIII, sino que los ahora denominados haitianos eran llevados a la isla de diferentes partes para trabajar, ya que se producían cantidades gigantescas de azúcar y café, que Francia aprovechó y por cuya causa tuvo gran riqueza.
Los esclavos eran explotados al grado que no se podían reproducir, y se mantenían trabajando hasta el agotamiento final, que era la muerte. Jamás fueron curados o sanados porque eso costaba dinero. Una vez morían, eran sustituidos por otros.
Dado que los esclavos provenían de diferentes culturas, no había una unidad que permitiera que tuvieran una entidad como nación, y aunando las condiciones de esclavitud, esto provocó que ocurriera un fenómeno prácticamente único que se denomina "sociedad fallida", y es debido a eso que a pesar de su independencia no haya podido salir adelante, ya que sin identidad ni unidad ni recursos pues sus pobladores tenían distintas lenguas, cultura y costumbres,sencillamente cómo.
Después fue Estados Unidos quien partió ahí el pastel, y ahora yo me pregunto si tanto Francia como USA estarán dispuestos a devolver a ese sufrido país una ínfima parte de lo que le fue despojado...
Y mientras tanto, nuestra conciencia social ¿nos llevará a donar siquiera una caja de botellas de agua?

Por otra parte: sigo aplicando calor a mi zona de la columna que lo necesita, y me voy sintiendo mejor que los otros días. Gracias Gustavo, Alex, Edgar, amigos, por estar al tanto.

Felicidades a mi querido amigo poeta Óscar Wong, que ahora está a cargo de la Dirección de Publicaciones del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes en Chiapas, donde sabemos que están de plácemes por el nombramiento.

Esta tarde-noche, según pronóstico y Protección Civil, esperamos fuertes lluvias en la zona costera del estado, por lo que me preparo para el ruiderazo ya que mi techo de madera, si tal sucede, no irá a darme tregua.

Comentarios

Pat ha dicho que…
Querida Liz, estuve fuera del país algún tiempo, y el regreso ha sido difícil para retomar mi tiempo, mis silencios mis momentos. No quería dejar pasar más tiempo sin venir a saber de ti. Nos hablas de Haití, creo que todos llevamos una parte de su dolor en nuestras manos, en los labios en el alma, acá se ha movilizado mucha gente, han muerto algunos chilenos que estaban apoyando a su gente, ha sido tan terrible.
Me contaba un amigo que leyó el último libro de Isabel Allende que en el relata muy acabadamente de como se formó y poblo esa isla, creo que valdrá la pena leerlo, sobre todo ahora.
Te mando un abrazo y disfruta de esas lluvias, cuando no se tienen saben a vida.
Besos.
Idan Sáenz ha dicho que…
Donar agua y elevar una oración que, aunque sea blanco de algunas burlas, creo con firmeza que es de gran utilidad. Desprendámonos de un poco de lo que diariamente disfrutamos y seguro nos sentiremos mejor con nosotros mismos.

Que bueno es saber que el cojín aquél está dando resultado... esperemos que todo vaya aún mejor en los próximos días.

Te vas a reír de mi, pero me encantaría estar bajo el ruiderazo de ese techo de madera bajo la lluvia... Amo la lluvia y amo el clima húmedo y el frío intenso... solo de imaginarme una noche lluviosa bajo un techo de madera me siento un tanto emocionado.

Un beso.
Unknown ha dicho que…
Hola querida Liz,
Bueno pero esa no era la misma situacion de las otras islas caribenhas ? Creo que el no desarrollo de Haitidebe tener otros factores , no se.

Acabo de leer algunas de sus entrada de los ultimos dias. No sabia que de nuevo esta tan mal de su espalda.Aqui yo puedo ayudarle pero necesitamos que venga, unanestesiologo del hospital hace un tratamiento muy efectivo para lesiones radiculares( como lo que Ud tiene) y le ha ayudado a mucha gente. Es una sola infiltracion en la columna ,y el esfecto dura meses, Cuando puede venir,Yo le ayudo con mucho gusto.Dese un descanso de todo, traiga sus cuadros acompanhenos un rato aqui donde tanto la apreciamos y queremos.

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